Por muchos motivos la depresión masculina es ignorada y son los mismos hombres quienes se resisten a aceptarla, asumirla y seguir el tratamiento correspondiente. El concepto de masculinidad bajo el cual se desarrolla un gran número de hombres, es quizás la causa de principal por la cual muchos caballeros prefieren enmascarar la situación con comportamientos poco saludables.
Es fundamental entender que la depresión afecta de forma diferente a hombres y mujeres. Aunque se trata de un padecimiento que no hace distinción de género ni edades, las características de la depresión masculina son un poco diferentes. Sumado a esto, es usual que no se realice un diagnóstico temprano, por lo cual los síntomas pueden empeorar rápidamente.
¿Cuáles son las señales y síntomas de la depresión masculina?
Por lo general, los hombres utilizan diferentes mecanismos para lidiar con la depresión. Estos mecanismos son usualmente evasivos y no tan saludables, por ejemplo, la sensación de aislamiento se convierte en la excusa perfecta para salir por un trago. No obstante, algunos tienen habilidades de afrontamiento que resultan positivas para lidiar con el problema sin acudir al psicólogo.
No se sabe con exactitud cuál es la razón por la cual hombres y mujeres perciben la depresión de maneras diferentes. Todo apunta a que existen factores como la química cerebral, como el nivel de hormonas, las experiencias personales. En general, tanto hombre como mujeres presentan algunos comportamientos comunes cuando padecen episodios depresivos:
- Pérdida de placer por las actividades que usualmente se disfrutaban.
- Sentirse vacío, con cansancio extremo, dificultad para conciliar el sueño.
Sin embargo, en los hombres existen otros comportamientos muy particulares que suelen ser señales de alerta de una depresión en curso:
- Comportamientos de evasión o escape (trabajar de más, hacer deportes de manera obsesiva).
- Problemas con el consumo de alcohol y otras sustancias adictivas.
- Ira, irritabilidad.
- Desarrollo de comportamientos de riesgo, actitud imprudente al volante, etc.
- Comportamiento abusivo, violento o controlador.
¿Por qué se suele diagnosticar con menos frecuencia?
Al parecer, el concepto de masculinidad errónea que se ha difundido, ha servido para normalizar comportamientos depresivos en los hombres. Así, el abuso del alcohol, trabajar demasiado y tener un temperamento iracundo e irritable, dejan de ser señales de alerta de una enfermedad y pasan a ser rasgos característicos de la masculinidad malentendida.
Otras razones por las cuales no se diagnostica correctamente o no se atiende a las señales de alerta relacionadas con la depresión masculina, son las siguientes:
- Falta de reconocer la depresión y confundirla son simple tristeza.
- Minimización de los síntomas a causa de la necesidad de mostrar fortaleza.
- Negarse a hablar abiertamente sobre los síntomas y aquello que sentimos.
- Resistirse a la necesidad de recibir tratamiento mental o medicación.
El tratamiento psicológico a manos de un profesional es la única forma de aprender a desarrollar las habilidades de afrontamiento más saludables, como trazar metas, aprender a buscar apoyo emocional, tomar decisiones importantes y realizar actividades que resulten gratificantes.