4 razones por las que beber cerveza puede ayudarte a mejorar tu rendimiento en el gimnasio
A lo largo de los siglos, el consumo de cerveza no sólo ha producido numerosos beneficios para la salud, sino que también se puede decir que ha salvado vidas. Un hecho histórico de lo anteriormente señalado, ocurrió durante la Edad Media, los que bebían cerveza sobrevivían porque las bacterias dañinas que contaminaban el agua potable eran eliminadas durante la fase de ebullición de la cerveza, mientras que los que bebían agua no lo hacían.
Debido a su contenido nutricional, la cerveza es capaz de ayudar al metabolismo del cuerpo, al funcionamiento del sistema nervioso, a la contracción muscular, a la formación de células sanguíneas, a la protección de las enfermedades cardiovasculares e incluso a mejorar la función intestinal y la inmunidad natural del cuerpo.
Investigaciones recientes han confirmado que la cerveza contiene prebióticos – fibras dietéticas indigeribles, básicamente alimento para las bacterias buenas del intestino llamadas probióticos. Los prebióticos estimulan la salud de los probióticos en el tracto intestinal, digamos que casi como un yogurt, pero mucho más refrescante y burbujeante.
CERVEZA Y EJERCICIOS, UNA COMBINACIÓN GANADORA
¿Has notado que después de hacer ejercicio, lo único que quieres es una cerveza helada y refrescante? Resulta que un grupo de investigadores de la Sociedad Europea de Cardiología, han descubierto que el consumo de cerveza libera cierta cantidad de endorfinas en nuestro cerebro, lo cual funciona en nuestro cerebro como una especie de sistema de recompensa y motivación para seguir en actividad. Cuando las endorfinas del ejercicio y las de la bebida se combinan, es decir, cuando consumimos una cerveza bien fría poco después de nuestro entrenamiento, se crea una reacción bioquímica que nuestro cuerpo recuerda y quiere replicar una y otra vez. Es decir, subconscientemente nos animamos a ir al gimnasio al día siguiente para tomar una cerveza después del entrenamiento. Así que si realmente quieres usar la membresía del gimnasio en el que te inscribiste, toma una cerveza después de tu primer entrenamiento.
LA CERVEZA PODRÍA SER MEJOR QUE UN BATIDO DE PROTEÍNAS
Antes o después de una sesión intensa en el gimnasio, es común ver que la mayoría de las personas van a tomar un batido de proteínas, pero a ti realmente se te antoja tomar una cerveza bien helada ¿cierto?, pues qué crees: Tomar una cerveza te va ayudar con todos esos músculos adoloridos que es muy probable que tengas luego de hacer esa serie de press de banca.
¿Por qué cerveza? Porque esta bebida contiene varios nutrientes, entre ellos el selenio (que contiene antioxidantes), las vitaminas del grupo B (que ayudan a obtener energía), el fósforo (que se dice que ayuda a tener huesos y dientes fuertes) y la niacina (que posiblemente sea beneficiosa para el colesterol). Por si esto fuera poco, la cerveza contiene una buena cantidad de proteínas, un poco de fibra y silicio, que según algunas fuentes puede prevenir la osteoporosis. Según los investigadores, todos estos son nutrientes que son ideales para que el cuerpo los consuma y asimile de una manera mucho más óptima después de ir al gimnasio. Es decir, antes de estar gastando dinero en batidos de proteínas complejas, sin saber si realmente funciona o no, simplemente puedes elegir una buena cerveza, recordando que el consumo debe ser moderado y sin excederse con el alcohol.
CERVEZA INDUSTRIAL vs CERVEZA ARTESANAL
Los fanáticos de una espumosa bien fría post workout, se debaten entre elegir tomar una cerveza industrial o tomar una cerveza artesanal.
Mientras que los primeros no le dan importancia al origen de las cervezas industriales, sobre todo porque lo que quieren es refrescarse y seguir con sus rutinas, los defensores a ultranza de las cervezas artesanales señalan que, cuando se hace una comparación con las cervezas corporativas producidas en masa, las cervezas artesanales contienen muchos más ingredientes clave que se suponen que están en la cerveza. Estos ingredientes contienen los mismos compuestos que son la fuente de los beneficios de la cerveza para la salud.
Por ejemplo, las cervezas artesanales que son ricas en malta de cebada y lúpulo contienen más silicio que las que no lo contienen. El lúpulo contiene más silicio que el que se proporciona a través de las cáscaras de las maltas de cebada, pero el uso del lúpulo en comparación con el uso de las maltas es menor en la elaboración de la cerveza, por lo que ambos ingredientes son necesarios para alcanzar un mayor contenido medio de silicio. Por lo tanto, mientras menos procesada sea una cerveza, mayor sería el beneficio que obtendría la persona que la tome luego de una sesión en el gimnasio.
TOMAR CERVEZA, ¿ANTES O DESPUÉS DEL ENTRENAMIENTO?
Para que las propiedades antes mencionadas de la cerveza, puedan ser asimiladas de la mejor manera posible, los investigadores también concluyeron que el momento óptimo para consumir la bebida es justo después del entrenamiento y esto se debe a varias razones:
- Aunque la cerveza no es considerada como una bebida isotónica, gracias a su composición va a ayudar a reponer los niveles de electrolitos, así como también los hidratos de carbono y minerales perdidos durante la actividad.
- Dado que el silicio forma parte de los componentes de la cerveza y en vista que este mineral es crucial para la recomposición del tejido óseo, obtenerlo a través de una buena cerveza es una jugada inteligente por parte de cualquier persona que se encuentra entrenando.
- Luego de una sesión intensa de ejercicios, generalmente pueden existir micro roturas o pequeños daños a los músculos, pero gracias al alto contenido de vitaminas, lactosa y glucosa presentes en la cerveza, la misma tiene un efecto regenerador y antioxidante sobre el propio sistema muscular.
- La diferencia entre la cerveza y otras bebidas alcohólicas es que está hecha a base de lúpulo. El lúpulo es un ingrediente con propiedades antiinflamatorias, por lo tanto, es perfecto para desinflamar los músculos que hayan sido trabajados previamente.
- Y si aún no es suficiente, la cerveza puede reducir el riesgo de que se acumule placa en las paredes arteriales de los vasos sanguíneos, lo que contribuye a reducir eventualmente alguna obstrucción arterial, lo cual es un factor de riesgo para un ataque al corazón.
Así que ya sabes, no te sientas culpable por sentir ganas de tomar una cerveza helada post workout y mucho menos ahora, luego de haberte dado las razones y los motivos para incorporarla en tu estilo de vida saludable.
Salud!